Cuando niños vivimos un gran temor,
todo parece girar alrededor del miedo a extrañas criaturas,
monstruos horribles que nos causaran daño.
pero nunca te imaginas,
que un día tengas que vivir al lado de uno,
dormir con uno,
estar cada segundo conviviendo con uno.
Sabes el daño irreparable que eso causa?
vivir al lado de alguien que no está bien emocionalmente?
no te imaginas siquiera...
vivir al lado de un monstruo como esos,
que te destruye, que te lastima,
con el tiempo nos acostumbramos,
y la situación nos hace un poco como ellos,
nos devora el alma y los sentidos,
nos destruye desde lo más profundo,
pero una parte nuestra lucha por no dejarse vencer,
porque no seamos uno de ellos,
no nos lo podemos permitir.